El sol está cada día más debil. Las calles, el metro, los lugares de trabajo con más personas apuradas, en el paradero observas las mismas palomas gordas enseñando a comer mugre a las palomas adolescentes. Se acaba el verano y te quedas con fotos, discos, pequeños papeles manuscritos y tickets de algo que no quieres botar.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario